En esta época de confinamiento que nos ha tocado vivir y atendiendo al tiempo que tendremos que pasar en el interior de las viviendas, aprovecho la ocasión para escribir sobre la importancia de mantener una vivienda saludable.
Según informes de la OMS, en circunstancias normales las personas pasamos alrededor del 90% del tiempo en espacios interiores, sin embargo, muchos de nosotros no estamos concienciados con los riegos derivados de este estilo de vida, somos la llamada “generación doméstica”
Actividades diarias de la vida en los hogares como cocinar, limpiar, ducharse, secar ropa e incluso dormir y respirar, fomentan un aire contaminado en el interior, lo que con el tiempo puede derivar en la aparición de moho y hogares húmedos, aumentando así el riesgo enfermedades respiratorias. Los objetos cotidianos del hogar: detergentes, juguetes deplástico, o los propios materiales de construcción, pueden liberar toxinas empeorando la calidad del aire interior.
El aire del interior de nuestras viviendas puede estar más contaminado que el aire exterior, pudiendo ser las habitaciones de los niños las estancias más contaminadas de la vivienda. Actualmente las viviendas suelen estar mejor aisladas lo que provoca en algunos casos un aumento en su estanqueidad y una deficiente renovación del aire.
En los próximos días vamos a pasar más tiempo del habitual en nuestros hogares a consecuencia de la pandemia provocada por el COVID-19, atendiendo a ello y con la finalidad de lograr un ambiente saludable en el interior de nuestras viviendas, lo que redundará en una mejora anímica y física durante estos días de confinamiento, se recomiendan las siguientes medidas:
1. Mantener una temperatura de confort de 21ºC para invierno y 26ºC verano. En unas condiciones de humedad relativa del 50 % y ausencia de corrientes de aire la temperatura de confort empieza a los 20,5 ºC, por lo que podríamos poner la calefacción a partir de esa temperatura si queremos ahorrar; se estima que por cada grado que aumentamos la temperatura del hogar el consumo energético aumenta en torno a un 7%.
2. La humedad incide directamente en el confort del interior de la vivienda. Se debe vigilar que la humedad esté siempre comprendida entre el 40 % y el 60%. Presta especial atención a aquellas actividades que aumentan la humedad del aire en el interior ya que pueden provocar condensaciones en las viviendas; es recomendable ventilar el baño después de ducharse; evitar tender la ropa en el interior, si no puedes secar la ropa en el exterior, intenta abrir una ventana cerca de donde esté secándose para poder eliminar parte del exceso de humedad; disminuir al mínimo imprescindible las tareas de plancha con vapor así como la cocción de alimentos que desprenden mucho vapor de agua “olla exprés”…
3. Ventila la vivienda por la mañana, es la hora perfecta del día para hacerlo ya que suele ser el momento más cálido y en el que menos notará tu vivienda el descenso de temperatura; será más efectivo si lo haces habitación por habitación, sube bien las persianas, abre la ventana de par en par y cierra la puerta; será suficiente con que tus ventanas permanezcan abiertas aproximadamente de diez a veinte minutos.
4. En la situación actual, es recomendable realizar con frecuencia la limpieza y desinfección de las viviendas. En la mayoría de los productos de limpieza hay sustancias químicas (formaldehidos) por ello se recomienda ventilar las estancias una vez que se ha realizado la limpieza de las mismas, en la medida de lo posible utiliza paños de micro fibra y materiales naturales, como el vinagre blanco, por ejemplo.
5. Limpia y ventila las alfombras ya que tanto en las alfombras como en los sofás se acumulan ácaros y bacterias.
6. Asegúrate de que en tu hogar entra tanta luz natural como sea posible. Lo ideal es que las cortinas y las persianas estén completamente abiertas durante las horas diurnas. Si tu hijo tiene un espacio de trabajo o algún tipo de mesa, procura que esté cerca de una ventana.
7. El olor conocido comúnmente como “olor a cañería” se produce cuando en los aparatos sanitarios que no se utilizan con frecuencia se vacían los sifones, que es la barrera que evita que no pasen los malos olores de los desagües al interior de las viviendas, para reponer este sellado hidráulico basta con abrir el agua de todos los grifos durante al menos 30 segundos y el olor desaparecerá inmediatamente al producirse el sellado de los mismos.
Esperando que estos consejos les puedan ser de utilidad y con el fin de hacer más llevadero este periodo inusual que nos toca vivir. En nombre de la JUNTA DE GOBIERNO DEL COLEGIO DE APAREJADORES DE LUGO, deseamos que pasen este periodo de confinamiento de la mejor manera posible, recordando que el hecho de mantener un ambiente saludable dentro de sus viviendas incidirá de forma favorable sobre su salud.
Antonio Javier Núñez Núñez Presidente COAT Lugo .
